Morelia, Mich., 24 de julio, 2022.- Como “pecados aberrantes”, tachó la homosexualidad y el lesbianismo, el obispo auxiliar de Morelia, Herculano Medina Garfias, durante la misa del domingo en la catedral de esta ciudad, por la Jornada de Oración por la Paz ante los asesinatos y desapariciones en el país, los cuales atribuyó a la comunidad LGBTl+ en nuestro país. Asimismo, comparó a México con Sodoma y Gomorra, durante la citada Jornada de Oración por la Paz convocada por la Conferencia del Episcopado Mexicano en todo el país. Durante la ceremonia eucarística que se realiza, este domingo 24 de julio en todas las iglesias del país, a convocatoria de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) por la justicia, la reconciliación y la paz, el obispo se fue a la yugular a la comunidad gay del país, luego de que el mes pasado, los festejos a nivel internacional estuvieron enfocados hacia la comunidad diversa sexual. El hombre de la sotana dijo que la práctica del homosexualismo es la causa de la violencia. De manera inquisidora, destacó: "en las sociedades de Sodoma y Gomorra se practicaban pecados aberrantes como es la homosexualidad y el lesbianismo, también esos pecados hoy en día han proliferado en nuestra patria y el mundo entero, hoy no se le quiere llamar pecado a la conducta que no va de acuerdo con la naturaleza y la voluntad de Dios", resaltó. Exhortó a los michoacanos orar para no aceptar como normal lo que es un pecado, ya que agregó que el lesbianismo y la muerte de inocentes son conductas que alejan a la persona de su naturaleza y de la voluntad de Dios. Desde el altar de la catedral de Morelia, repleta de personas, expresó que hay otros pecados, tales como la muerte y retener salario a los trabajadores, a estos los llamó “pecados de injusticia”, sin embargo, fue menos enfático al señalarlos. “Hay otros pecados que claman al cielo, como es la muerte a los inocentes, retener el salario a los trabajadores, sin pagarles lo justo, también hay pecados que explotan a los huérfanos y viudas, y por eso había determinado en el testamento destruir estas ciudades, porque el pecado se había desbordado y lo que había creado, en orden, en gracia y todo esto se vive en nuestro país, estados y ciudades”, indicó. Agregó que lo que se vivía en Sodoma y Gomorra es todo lo que hoy se vive en nuestro país, estados y ciudades, de ahí la necesidad de intensificar la oración. La Jornada de Oración por la Paz, convocada por la Conferencia del Episcopado Mexicano, la Conferencia de Superiores Mayores de Religiosos de México y la Provincia Mexicana de la Compañía de Jesús, exhorta en todas las misas a celebrarse en julio hacer memoria de todos los sacerdotes, religiosos y religiosas que han sido asesinados en el país y colocar fotografías de estos hombres y mujeres que han dado su vida por el pueblo de Dios y han recibido la muerte violenta. A celebrar misas o realizar oraciones comunitarias en lugares significativos que representen a todas las personas que han desaparecido o sufrido una muerte violenta, sean homicidios dolosos, feminicidios, activistas sociales o cualquier otra persona en situación de exclusión o vulnerabilidad. Asimismo, destacó que en las eucaristías del próximo 31 de julio próximo se pide por los victimarios, se ore por sus vidas.